LA HISTORIA
DE DÈMAS, AMIGO INTIMO DEL APOSTOL PABLO A QUIEN ABANDONO CUANDO MAS LO
NECESITABA.
*Demas
estaba en el camino de la vida, pero lo cambio por el más fácil. *Se aparto de
la vida cristiana y mejor huyo a Tesalónica.
*Mejor abandono a su mentor Pablo a evitar ser
enjuiciado por el loco y tiránico emperador Nerón. *Más vale: aquí corrió que
aquí quedó, dice un refrán popular.
Por Jesús López
Sandoval
Son
muy pocas las líneas del nuevo testamento donde su nombre es mencionado, pero
es tan enorme como un océano su acción, que quedo marcado en los anales de la
historia, ya que no es muy grande la diferencia de los grandes amigos cuando
abandonan al prójimo, cuando se enteran de que entró en bancarrota, o le
detectaron una grave enfermedad, o cayó en desgracia y no se vuelven aparecer
en su vida jamás.
Y caso contrario son las situaciones cuando
alguien se saca la lotería, salen amigos hasta debajo de las piedras.
Es
entendible que, durante el gobierno romano de Nerón, las cosas se tornaron muy
difícil ya que este era muy sádico en la forma de castigar a sus enemigos y más
contra los cristianos a quienes consideraba sus acérrimos adversarios: arrojaba
a sus enemigos al coliseo para que fueran devorados por perros hambrientos, a
otros los quemaba vivos, o los crucificaba o les practicaba la pena capital: la
decapitación.
Al
ver que el apóstol Pablo se encontraba junto con otros en espera de ser
ejecutado y el gran temor de que fuera detenido, Demas prefirió abandonar la fe
cristiana y huir a la ciudad de Tesalónica, olvido de tajo lo que el apóstol le
había enseñado.
Abandono la fe cristiana con muchísimos años
en el ministerio, siempre muy cerca del apóstol Pablo, era como su asistente,
su brazo derecho, y que para no padecer la persecución y no vivir en carne
propia la ira del temible Nerón… mejor desapareció del mapa (más vale, aquí
corrió, que aquí quedo) .
Sabía muy bien que Pablo iba a ser
ajusticiado y mejor opto por poner pie en marcha y huir con el temor de que él
también fuera alcanzado por la furia de Nerón, que había crecido mucho más
cuando Roma se suscitó un voraz incendio que casi destruyo la ciudad y el
sádico emperador no busco quien se las hizo, sino quien se la pagara y se fue
encima de los cristianos.
Pablo fue autor de muchos libros del nuevo
testamento de la biblia como Tesalonicense, Hebreos, Gálatas, Colosense,
Efesios, Corintios, Romanos, entre otros, el apóstol siempre pregunto desde el
calabozo por su amigo Demas, pero jamás se volvió aparecer y tras sufrir un
agónico y penoso martirio durante la cárcel, en la Decapitación, la cabeza del
apóstol Pablo rodo por el suelo después de que el implacable verdugo le dejara
caer con toda su fuerza, el hacha sobre su cuello.
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