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| Por un plato de lentejas, aprovechando que tenia hambre, vendió Esau su progenitura a Jacob |
Por Jesus Lopez
* Había gemelos en su vientre, entonces salió el primero y
lo llamaron por nombre Jacob y después salió su hermano con la mano tomando el talón
de Esau. Libro Génesis 25:25-26.
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| Esau era hijo preferido de su padre Isaac |
La historia de
Esaú y el patriarca Jacob se gesta desde el seno materno, en la disputa por la
supremacía se gesta como algo natural al ser humano. Al narrarse el nacimiento
de Esaú como primogénito al que su hermano Jacob le agarra el talón, se
describe como la figura o modelo de lo que seguirá siendo la historia del
hombre a pesar de tener un mismo origen.
Esaú al ser
hijo primogénito es el preferido de su padre, uno de los grandes patriarcas de
la historia de Israel, Isaac, se dedica a la caza y labores fuertes del campo;
en cambio, Jacob es más allegado a su madre Rebeca por dedicarse a ayudarla en
las actividades propias del hogar. Muy distintos los dos y con distintos
protectores.
Tanto es así
que simbólicamente Jacob se volvió astuto y logro preparar comidas exquisitas
que posteriormente van a hacer ganar la primogenitura a su hermano Esaú que la
cambio por un plato de lentejas un día que venía hambriento y cansado de sus
labores y como hombre de lucha no reparo en la astucia que tuvo su hermano para
intercambiar un derecho de familia por
aquel platillo.
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| Jacob aprovecho que se padre era ciego para engañarlo y que le diera su bendición |
Una vez Jacob
estaba cociendo un guisado de lentejas cuando llegó Esaú venía del campo y
estaba cansado, de modo que le dijo “¡aprisa por favor, dame un bocado de lo
rojo que esta allí (lentejas) porque estoy cansado¡” .A esto dijo Jacob “¡véndeme,
ante todo, tu derecho de progenitura!” y Jacob dio a Esaú pan y guisado de
lentejas, y el se puso a comer y beber . Así que Esaú despreció la primogenitura.
Libro Génesis 25: 30-34.
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| Rebeca fue determinante para este acontecimiento histórico |
Pero como se preparó
tanto Rebeca como su hijo Jacob para convencer de manera astuta a Esaú de ceder
este importante cargo familiar como es la de ser el primogénito de la familia y
tener la mayoría y las mejores
oportunidades en la vida por gozar de este derecho, el Teólogo mexicano
Marco Antonio Jiménez Olan descifra estos misterios al considerar que realizaron un trabajo muy
fino pero decidido porque un error implicaría maldiciones en vez de
bendiciones.
El especialista
en temas de la biblia consideró que la sagacidad de Rebeca logro ganarle a Esaú
la bendición para su hijo menor Jacob al que lleno de valor y seguridad para no
fallar en el momento preciso, todo esto nos manifiesta lo que una madre puede
hacer por conseguir beneficios para su hijo consentido o preferido.
A través de la
historia se ha visto sucesos parecidos y que son propios de la naturaleza
humana en donde la madre prefiere al hijo menor o al que parece menos apto para sobrevivir en
determinadas circunstancias, y en otras la decisión es simplemente para buscar
el poder sin importar las condiciones en que quedan los demás, por esto no se
puede condenar la actitud de Rebeca porque solamente es una madre de su menor
aunque tampoco se puede exonerar porque todos los hijos valen igual.
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| El gran Patriarca de Israel, Isaac, fue engañado por su esposa Rebeca y su hijo Jacob |
Jiménez Olan
consideró que en la actualidad el texto de génesis puede servir no como
anécdota sino como la invitación a no imitar la postura de Rebeca, que a pesar
de ser astuta, valiente y decidida tras darle a su hijo menor la posibilidad de
ser el primogénito, representa a la madre que no busca la unidad y hace
preferencias por uno u otro hijo, olvidándose que todos tienen la posibilidad
de ser valientes, decididos, astutos y valerse por sí mismos a pesar de no ser
primogénito o el ultimo, o la oveja
negra, hay que considerar que en los dedos de la mano no todos son iguales pero
son valiosos y forman la unidad.
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