miércoles, 13 de marzo de 2019

EL MATRIMONIO SEGÚN LA BIBLIA


*Dos son mejor que uno, porque si uno cae, el otro puede ayudar a levantarlo.
Uno debe estar a sujeción del otro, en las buenas y en las malas.
Por Jesús López Sandoval

La familia es el centro neurálgico de la sociedad y el cristiano debe escoger bien a quien va a ser su cónyuge para toda la vida y cuando va a tomar esta importante determinación debe preguntarse a sí mismo: ¿Porque quiero Casarme?.
   El primer paso que da es observar a la persona que le interesa para que sea su pareja para toda la vida, hasta que la muerte los separe; el segundo paso es cuando le dice algo a la persona que le gusta y si acepta, llega al tercer paso que es el noviazgo cuya relación puede tardar dependiendo de los acuerdos que lleguen entre ambos y puede ser desde unos meses hasta años.
Una esposa capaz su valor es mucho mayor al oro.
   El cuarto paso es cuando ambos hacen el compromiso de casarse para formar una familia y éste se concreta hasta el día en que llega la boda que vienen considerando como "el día más importante de sus vidas", ya que estarán formando una familia para siempre. Formar una familia es una necesidad del ser humano para reproducirse, tener descendencia.
   Dice la biblia que dos son mejor que uno, porque si uno cae el otro puede ayudar a levantarlo. Una esposa capaz su valor es mucho valor que el de los corales, dice el libro de proverbios 31:10, ya que en ella el corazón de su dueño, ha cifrado confianza y no falta ninguna ganancia, además de que será una esposa que vigila como marchan los asuntos de su casa y no comerá el pan dela pereza: es trabajadora, generosa y sabia.
   La unión debe ser para toda la vida tal como lo marca el libro de la biblia primera de Corintios, donde la esposa deben estar atados todo el tiempo en que su esposo viva, pero si su esposo se durmiera en la muerte, está libre para casarse con quien quiera.
   Pero mientras dure el matrimonio, el hombre será la cabeza de la mujer como Cristo lo es de todo varón o Dios es la cabeza de Cristo, la mujer estará a sujeción de su marido.
   El deber de todo esposo es siempre amar a su esposa como lo hiciera sobre su propio cuerpo. El que ama a su esposa, así mismo se ama porque nadie ha odiado jamás a su propia carne, antes bien la alimenta, la acaricia y los dos llegarán a ser una sola carne, este secreto sagrado es grande, la esposa debe tener profundo respeto por su esposo. Libro de Efesios 5: 21-33.
   Como en toda relación humana padre hijos, la sociedad en general siempre existirá las diferencias, por eso esposas estén en sujeción de sus maridos y esposos no se encolericen amargamente con ellas, vístanse de los tiernos cariños dela compasión, la bondad y la humildad, sopórtense uno a otro y perdonándose en las diferencias que existan como pareja|.      






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