martes, 26 de marzo de 2019

EN GRANDES TEMAS DE LA BIBLIA: CARGUEN CON MI YUGO QUE SOY DE CORAZÓN MANSO Y HUMILDE



Por Jesús López Sandoval
En este pasaje San Mateo muestra las características interiores del corazón de Jesús, ese corazón que es el que lo impulsa a ir en busca de las ovejas perdidas haciendo también hincapié en que la ley del amor, esa que sale del corazón manso y humilde del nazareno es una ley suave y ligera, es decir que no pesa porque deben moverlo el amor.
  En el pasado los Israelitas cargaron una ley que hasta en los puntos y acentos lastimaban al pueblo por ser pesada, siendo una ley fría, impávida y que debía aplicarse tal cual sin considerar a ningún ser humano, muy distinta a esta ley que el nuevo legislador proyectara en este pasaje bíblico.
 Una ley suave y ligera, un yugo que es fácil de cargar porque lleva más que perdón y amor, esta es la ley que el maestro y nuevo Moisés encomienda a sus discípulos: "Sean como yo, manso y humilde de corazón".
 Al mismo tiempo nos hace ver que viviendo en esta ley las anteriores quedan abolidas porque donde existe el amor cabe el perdón y deja de existir el temor: vengan a mí los que están cansados y cargados y yo les haré reposar (en verdes prados, así como dice el salmo)".
 Con esto se remarca la diferencia existente entre la ley del antiguo testamento, que infundía temor y era imposible de cumplir, en cambio la ley del amor la que el humilde carpintero de Nazaret trae impreso en su corazón.
 Es la que hereda a sus discípulos, ley que no es pesado porque en ella no hay odio ni rencor, mucho menos temor, porque el amor infunde tranquilidad, confianza y sólo puede despertar amor y más amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario